miércoles, diciembre 14, 2005


Desde aquí en la tranquilidad de mi hogar y en la compañía de un ángel.
Quiero compartir el sentimiento de los días que se aproximan... Quería haber ido al pueblo de Mamiña, a esperar el nacimiento de Jesús, pero se me adelantaron y no podré ir hasta la primera semana de Enero, en realidad el primer fin de semana.
Mis hijos estan abocados a sus labores diarias, las mujeres salen a trabajar y los hombres terminando de estudiar y buscando algún trabajo de verano, en gran parte para financiar sus actividades de fin de semana.
Yo; por ahora me quedo en casa mirandome en unos ojos de color cielo, que me recuerdan a mi primera hija, que creció muy rápido. Los hijos de mis hijas, son dos hermosos varones que iluminan toda mi casa con su presencia, la recorren, la desarman, la revuelven y le dan un sentido de hogar.